Tuesday, March 27, 2007
Menú 1
El Paraíso. Veintinueve de Mayo de dos mil dos. Descansa Eduardo porque hoy no hay nada complicado en el menú. Hay Crema de Apio o Consomé. El Apio lo tenemos y para hacer la crema sólo me toma una media hora. La pienso hacer mientras están los guisados. Por el consomé ni te preocupes. Voy a necesitar papas y zanahorias para guisar, así que, junto con lo que quedó, podemos hacerlo sin chistar. Pero no olvides poner el pollo a hervir. Porque el consomé que quedó no es suficiente. De todas formas tendré que levantarme a las cuatro. El del New Yorker no se levanta sino hasta las nueve y el doctor siempre llega temprano. Además le tengo que pagar al de la Basura, esperar al del Gas y comprar el pan, las tortillas, la leche para la crema y la pasta, pues continuamos con Spaguetis o Arroz. Hay Eduardo, ¡estás loco! Se te va a secar el cerebro. Haz lo que tu quieras, pero no olvides comprar el Chicharrón, que nada más tengo la salsa y los nopales y después seguimos con Nopalitos con Chicharrón o Salchichas con Puré. Sí, está bién. No se me olvida. Lo voy a apuntar, mira, ahí está juntito con la pasta, la leche y los cigarros de mi hija. ¡Oye! Y estás segura de que quieres hacer también el Pollo a la Hawaiana. Recuerda que mañana vas al Seguro. Luego no tienes tiempo y ahí estamos todos corriendo. ¡Chín! Se me había olvidado que tengo cita mañana. ¡Ay! Y es que sí me duele la espalda. Yo no sé que tengo, pero siempre por las tardes me punza aquí abajo. Aunque seguro la doctora me va a decir lo de siempre. Que yo no puedo trabajar de pie. Que tengo que estar relajada. Que mi columna no está fuerte. Que debo hacer más ejercicio. Pero bueno, por el Pollo no te preocupes. Eso lo hago rápido. Na’ más no se te olvide comprar la piña y los pimientos, porque después viene el Salpicón. ¡Ah! Y de paso te traes un poco de ajonjolí para las enchiladas. Acuérdate que todavía hay crema y bastante cebolla. Y no vayas a comprar más galletas, que entre tu y tu hija ya me tienen harta. Se la viven trague y trague todo el día, como pajarítos pero bien que le entran. Van a acabar echos una bola los dos. ¡Ay sí! A mi ni me metas en tus broncas. Además de que, tu, ni digas eh, mi Chemita. Que tu le entras a la comida pero con singular alegría. Hubieras visto manito, la otra vez me quedé a ayudarle a mis papás porque tuvieron muchos clientes afortunadamente. Lo único malo que es que acabamos muy tarde y sin comer, ya sabes, como hasta las 6 de la tarde. Como a eso de las cinco ya ninguno podíamos. Papá apenas y lavaba un traste cada tanto y yo ya quería sacarlos a todos de las greñas. Pero hubieras visto, estábamos Mamá, Papá y yo preparándonos la comida. Mamá preparó carne asada con su ensaladita de lado para nosotros, mientras se servía un plato sopero de nopales con salsa para botanear con sus tostadas. Luego, se sirvió una carne para ella sola. No habíamos terminado cuando ya se había servido otro poco de pollo desmenuzado, con mole y cebolla. Y para rematar, se sirvió, de postre, un plato de arroz con leche y su bolota de helado. ¡Papá y yo nos quedamos así! Nunca la había visto comer tanto. Eso no tiene nada que ver. Yo como a mis horas. Ustedes no paran de tragar. Por eso están tan gordos ya. Mírame a mí. Comeré mucho pero no estoy gorda. ¡Ay sí, ay sí! ¡Qué presumida! Qué presumida ni qué ocho cuartos. Véte de aquí que estoy haciendo el menú con tu padre. Ya tienes el mole. ¡Verdad! De postré haré gelatina. Por eso ni te preocupes. Yo ahí veo de qué tenemos y con eso la hago. Y por los frijoles y el arroz con leche ni te preocupes, que ahí hice ayer y aún queda bastante. Y eso de que la comida incluye un vaso de agua de fruta lo vamos a tener que eliminar pronto porque no está costeando. A ver si no terminamos por subir los precios otra vez. Pues es que esto está de la chingada oye. Mira nada más cuanto nos llegó de luz este bimestre. Y el gas del mes pasado no fue nada barato, carajo. De veras que en este país no se puede hacer nada. Lo tienen a uno agarrado del pescuezo. Cada vez suben más los impuestos y los costos. Y la pinche gente parece que se va a morir de hambre, porque ni a comer viene. Y eso de: 'cerveza, refresco, agua y huevo a once, nueve, cinco y tres por respecto', también lo vamos a cambiar. Tu no te preocupes. Nos va a ir mejor. Nada más no te me aceleres. Porque si no se me pone muy pesado y entonces sí ni pa’ tras ni pa’ lante. Y tu Eddie, sigue escribiendo. Pero si ya terminé. Cuál ya terminaste. Si to’vía te falta. Gracias por Preferirnos. Servimos Almuerzos desde veinte punto cero cero pesos.